Noticias de Helena xv

Helena (tres años y 3/4) está muy enfadada:

- 'Helena, ¡hemos dicho hace seis que esta era la última [película, episodio de Pipi Calzaslargas], y ya está bien, me cachis en los mengues!

- '¡¡Guááá!! ¡¡Guááá!! ¡Ah sí! Pues ahora voy a tirar esto, y tú-tú-tú y me voy y ya lo he tirado todo!

- '¡Helena, no rompas flores!

- ...

- '¡Helena, ¿qué es eso de romper plantas?!'.

- ¡¡...jjjjj... guáá... yo ... quiero.. otra... jjjj!!

- ¡Helena, ya está bien, me cago en los cojones de sandiós! ¡Todo lo que has tirado, ya sabes que lo recoges!

- ...

- ...

- [A lágrima viva] 'Papá, nunca te voy a querer, y nunca te voy a contar un cuento, y no me vas a llevar al cole, y vas a llorar por eso, y cuando me digas te voy a contar un cuento, te digo no y tú lloras, y estoy muy enfadada, ¡estoy muy enfadada!'

Luego llega mamá:

- '¡Mamá, estoy muy enfadada, te voy a llevar a la guerra, para que te mueras, y después voy a tener otra mamá que no eres tú, y déjame en paz y estoy muy enfadada, guáaáa!
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Nota: Marta dice que 'me cagüen los cojones de san diós' le suena como 'te lo juro por esnupi' o así, mas, tras reflexión, pienso que:
Cuando sueltas un exabrupto (desahogo) el sentido es lo de menos, en realidad lo haces, cuando eres pequeño para romper un tabú, y, siempre, más que nada para que el aire, la voz, el grito salga ordenado y con un ritmo contundente y machacón, como uno o varios golpes. Así, fijaos en el ritmo, la sonoridad y, sobre todo, los acentos de:

Me cÁgüen los co-jÓ-nes de sandiÓs:

trés

gólpes

bién

dáos.