Mariano no está a la altura

Tras el anuncio formal del presidente Rodríguez Zapatero de encontrarnos hoy "en unas circunstancias que me permiten tener la convicción de que puede empezar el principio del fin de la violencia" [de ETA], y su petición (a lo que se verá, inútilmente) de lealtad al PP ante un tema de Estado, la respuesta del ex-ministro del Interior Mariano Rajoy Brey nos confunde seriamente a la hora de tratar de inferir en qué equipo juega:

- Mariano reitera, sin pruebas, que este Gobierno miente; que se sabe de buena tinta que se está negociando vergonzantemente y a escondidas (y claudicando, osa; incluso el también ex-ministro del Interior Ángel Acebes Paniagua y el ex-ministro Portavoz del anterior gobierno Eduardo Zaplana Hernández-Soro jalean viejas consignas como 'precio político', 'paz por presos', 'presos a la calle', etc.).

- Mariano, además, y como gesto de magnanimidad democrática, se ofrece para un debate televisado con Zapatero sobre lucha antiterrorista*, sin aclarar los supuestos efectos beneficiosos que unos focos** aportarían al incipientísimo proceso de paz. Horas antes, proponía un pleno parlamentario monográfico en el que estaba dispuesto incluso a ¡estar callado!

Y esa es su contribución.

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* (y, ¿por qué, ya puestos, no incluir también al portavoz de la ilegalizada formación política Batasuna, Arnaldo Otegui Mondragón, amén de unos cuantos encapuchados entre el público?).
** Recordar que, en la campaña electoral de 2004, cuando iba de sobrado virtual presidente-heredero del ex-presidente J. M. Aznar López (hoy exiliado en Texas), el mismo d. Mariano se negó a tener un cara a cara mediático con el candidato socialista.